Henri de Toulouse-Lautrec (1864-1901), El Buen grabador (Adolphe Albert) o El Litógrafo

Litografía, 1898, Inv. 97.I.1.1

Los dos últimos directores de la casa Goupil, Maurice Joyant y Michel Manzi, son los amigos de artistas de su tiempo como Edgar Degas y Henri de Toulouse-Lautrec.  Influirán en la orientación artística de la firma hacia una más grande modernidad, afirmando la tímida tendencia que había iniciado Théo van Gogh cuando era responsable de la galería de arte Goupil en París, de 1878 a 1890.  Toulouse-Lautrec colabora con la casa Goupil a partir de 1892, retranscribiendo ciertas de sus obras en litografía, En el Moulin-Rouge o también El inglés en el Moulin-Rouge, por ejemplo.  Otras obras están también reproducidas en fotograbado.

Entre 1897 y 1898, la casa Goupil edita cinco litografías de la mano de Toulouse-Lautre, destacando El Buen grabador (Adolphe Albert).  Esta estampa original, tratada en un claro-obscuro que recuerda a Rembrand, muestra la espontaneidad del lápiz del artista.  En efecto, el procedimiento de la litografía no consiste en entallar una placa de metal, como el grabado, sino a dibujar con un grafito grueso sobre una piedra calcárea: el gesto aparece así más libre.

.

Henri de Toulouse-Lautrec (1864-1901), perteneciente al ayuntamiento de Burdeos, foto de B. Fontanel.

Henri de Toulouse-Lautrec (1864-1901), perteneciente al ayuntamiento de Burdeos, foto de B. Fontanel.